ECEBC — El ecosistema colaborativo para organizaciones sostenibles
Contexto
Pequeñas y medianas empresas están ya calentando sus hornos, limpiando escaparates y encendiendo ordenadores para volver a la nueva normalidad tras el duro parón impuesto por el Covid-19. Sin duda alguna, este virus parece haber arrasado con nuestra normalidad como un huracán que sobrevuela un territorio, y los restos que ha dejado a su paso son la huella de una reflexión colectiva sobre la normalidad que habitábamos antes del Covid-19.
Se empieza a escuchar como reclamo social “la normalidad era el problema” y es que ahora estamos en posición de reconducir y establecer un nuevo rumbo dirigido hacia aquellas cosas que pasaron desapercibidas y que tras el estado de alarma hemos aprendido a observar y apreciar. Estas cosas trascienden de lo material y se reconocen con aquello que llamamos lo social y medioambiental. Estas son la solidaridad, la unión, la colaboración, el aire y agua frescos, el canto de los pájaros o los rayos del sol. Algunas empresas y organizaciones están pasando y pasarán momentos difíciles en los próximos meses, pero también han reflexionado y se proponen una vuelta a la normalidad diferente.
De manera coetánea a esta reflexión colectiva, y gracias a la iniciativa COVID19CHALLENGE de UXERS EN ACCIÓN impulsada por UXERSchool y TEAMLAbs, nuestro equipo con diversos conocimientos se ha unido para conspirar en el diseño de soluciones que ayuden a empresas y organizaciones en su vuelta a una normalidad más sostenible. Han sido cinco semanas muy intensas en las que, mediante la metodología Design Thinking, hemos ido recogiendo datos y dado forma a una solución para las necesidades detectadas. Hemos trabajado diariamente en base al reto de plantear soluciones a la problemática del Covid-19 y el formato ha sido autogestionado y de carácter colaborativo. Por supuesto, y como no podía ser de otra forma, el trabajo ha sido elaborado de manera remota mediante videollamadas y ¡respetando los sagrados fines de semana!. Las herramientas utilizadas por el grupo de trabajo son las que aparecen a continuación:
En base a esto, lo que aquí venimos a plantear es una propuesta con el objetivo de que empresas y organizaciones que se sienten perdidas o que quieren mejorar en su gestión integral de la sostenibilidad, encuentren un espacio en el que resolver sus dudas, se asesoren, se formen, localicen a otras en su misma sintonía, reciban reseñas por parte de sus grupos de interés sobre sus buenas prácticas, y lo más importante, que no les resulte una tarea complicada o que requiera de una alta inversión. Es así como nació el Ecosistema Colaborativo de la Economía del Bien Común (ECEBC), una propuesta cada vez más consolidada y que está en el camino de convertirse en una plataforma web.
A continuación se describe el proyecto y las fases que han estructurado el proceso de diseño.
Fase 1: Comprender
Brainstorming inicial
Desde el minuto uno de nuestra primera video-reunión como equipo coincidimos en los beneficios que se estaban viendo gracias a la cuarentena en el cambio climático y decidimos enfocar nuestro reto hacia una solución que incluyese la sostenibilidad. Mercè nos presentó la Economía del Bien Común y nos gustó tanto ese modelo económico que decidimos que nuestra propuesta debía basarse en su matriz adaptada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Nuestro target
Tras lanzar una encuesta a más de 600 personas nos dimos cuenta de que efectivamente nuestros pensamientos y percepciones estaban alineadas con la idea mayoritaria y observación de los cambios positivos en el medioambiente debido al parón global que ha supuesto es Covid-19. Decidimos centrar nuestra atención en ofrecer una solución para PYMES y organizaciones, considerando que podíamos ayudarlas a tomar las medidas necesarias para un cambio sostenible y con ellas propagarlo a la sociedad.
Investigación
Definido nuestro target entramos en la fase de investigación y realizamos un total de 14 entrevistas telefónicas a responsables de PYMES y organizaciones en España. El objetivo de esas entrevistas en profundidad era entender sus frustraciones y motivaciones a la hora de gestionar su empresa considerando la triple sostenibilidad.
“Ser sostenible me resulta demasiado caro y de eso no saco ningun beneficio.”
“Siendo pequeño como empresa no puedo hacer muchas cosas por la sostenibilidad, de todas formas no sabria de donde empezar.”
“Mi producto es sostenible pero mi cliente no lo entiende.”
Fue bastante difícil sacar a las personas del contexto del Covid-19 pero pudimos igualmente identificar algunos patrones y conclusiones:
FACTOR ECONOMICO:
- Consideran que el aspecto económico es más importante que la sostenibilidad. No ven la inversión en sostenibilidad más allá de la económica, como una creación de valor.
- Están muy enfadados con el sistema capitalista pero para cambiar solo ven la motivación económica.
FALTA DE UN GUÍA:
- Aquellas quieren ser más sostenibles no se sienten acompañadas o no saben cómo hacerlo. Esto se ve tanto como un riesgo, sin que pueda haber beneficios, como una oportunidad.
- No se entiende que un individuo o una pequeña empresa puede ayudar con la sostenibilidad. Esperan que el cambio venga desde arriba (fabricantes y gobiernos) en vez de empujar para que pase (actitud reactiva ante la ley-mercado).
DOS ACTITUDES:
- La primera es reflexiva, normalmente dentro de un perfil de empresa un poco más grande que tiene capacidades para tomar una visión holística de lo que está pasando y ver oportunidades.
- La otra obsesiva, la observamos en empresas más pequeñas, que están mucho más preocupadas en aspectos económicos.
SOSTENIBILIDAD:
- Hay una visión sesgada del concepto de sostenibilidad.
- Hay una desconexión entre la ACCIÓN y la REPERCUSIÓN MEDIOAMBIENTAL.
- Falta trazar de donde viene cada material/producto. Las organizaciones no están seguras de ser sostenibles y ofrecer algo sostenible a sus clientes.
Fase2: Idear
Nuestro usuariado final
El análisis de las entrevistas nos ayudó a empatizar más con nuestro usuariado y a través de los resultados pudimos destacar las motivaciones, las frustraciones y las temáticas de interés, que más estaban en línea con nuestro reto y que volcamos en un mapa de empatía, herramienta que luego utilizamos para crear dos perfiles ideales: Laura y Joan, personas positivas, abiertas al cambio, con una visión del trabajo como lugar donde crecer personalmente aprendiendo y disfrutando lejos de estar obsesionados con el crecimiento empresarial. Estos dos perfiles nos orientaron a la hora de idear una solución que pudiese responder a sus necesidades y sanar sus frustraciones.
Co-creación del reto de diseño
Después de diferentes sesiones de co-creación pudimos, siempre bajo la metodología del Design Thinking, organizar y categorizar la información obtenida de las entrevistas, votar los insights más relevantes a través del consenso sistémico (método de decisión utilizado en la EBC que se basa en escoger la solución que genera menor dolor/rechazo entre quienes realizan la elección) y llegar a la formalización de nuestro reto de diseño en el formato “How Might We..?”:
Fase 3: Decidir
La idea
Con el reto de diseño planteado, debatimos nuestras propuestas que se complementaron y convergieron en la idea de realizar una plataforma web. Se trataba de diseñar un ecosistema colaborativo donde poder visibilizar y dar visibilidad a las buenas prácticas que existen en el ámbito de la triple sostenibilidad de acuerdo con las propuestas de los ODS y la EBC.
La propuesta de valor
Después de la definición de la idea nos pusimos de nuevo en la piel de nuestro usuariado para plasmar la propuesta de valor y desarrollar el modelo de negocio.
Nuestra idea se consolidó en el encaje entre el segmento de cliente y la propuesta de valor, de donde pudimos establecer las siguientes funcionalidades para la plataforma web:
- Autoevaluar el nivel actual de aportación a la sostenibilidad de la organización.
- Dar visibilidad a la propia aportación al bien común y a la sostenibilidad mediante un perfil público.
- Recibir sugerencias y consejos de mejora por parte de consultoría de la EBC.
- Localizar, contactar, establecer diálogo y colaborar con otras empresas y clientela afín a los valores de sostenibilidad.
- Acceder a formación online y mejorar el conocimiento en sostenibilidad, EBC y ODS.
- Obtener un distintivo que permita a la organización comunicar su aportación en su establecimiento y online.
Fase 4: Prototipar
Nuestro prototipo atípico
Tras formular nuestra propuesta de valor, ya queríamos hincarle el diente a la plataforma y empezar a dar forma a nuestras ideas generando un prototipo funcional. Sin embargo, la cautela nos hizo ponernos en contacto con potenciales personas interesadas antes de diseñar la plataforma para valorar cuán alineada estaba nuestra propuesta de valor con sus necesidades.
Para ello, y aprovechando el día del libro, decidimos hacer un híbrido entre encuesta y cuento, que llamamos En-cuenta. Se trataba de una narración ilustrativa de nuestra propuesta de valor que recogía la valoración de nuestro público interesado y nos ayudó a poner en relieve aquellas áreas a resolver.
Por una parte pretendíamos dar a las personas anteriormente entrevistadas los retornos y frutos del trabajo grupal y por otra nuestra intención era hacer de esos retornos una experiencia divertida que nos ayudase a seguir conspirando en nuestra plataforma colaborativa.
Fase 5: Testear
Testeamos la En-cuenta con las repuestas a las entrevistas iniciales junto a otras posibles organizaciones según el perfil definido. Los resultados de la En-cuenta fueron muy positivos, recibimos buenos feedback y los participantes mostraron gran interés por nuestra idea.
“Es muy interesante establecer una red de empresas que puedan cooperar e intercambiar experiencias y conocimiento.”
Entre las conclusiones más destacadas encontramos un mayor interés en el proceso de consultoría y la colaboración activa, así como la autoevaluación inicial sobre el nivel de sostenibilidad de la organización. Además, también recogimos algunas sugerencias y comentarios que ratifican nuestra idea de que debemos desarrollar una plataforma muy visual e intuitiva. En base a esto, la propuesta de valor no sufrió grandes cambios, por el contrario, se vió reforzada y lo suficientemente respaldada como para animarnos a seguir con este proyecto y desarrollar las funcionalidades de la plataforma.
Terminamos el challenge presentando a la comunidad el Ecosistema Colaborativo de la Economía del Bien Común (ECEBC)
:)
Próximos pasos
Está claro que esto no se acaba con el fin del challenge: estamos tan felices con las sinergias que se han generado dentro del equipo durante estas semanas y del interés mostrado por parte de las personas y organizaciones que queremos seguir adelante. Actualmente, estamos diseñando un prototipo funcional de la plataforma y recogiendo el apoyo de otras personas y organizaciones que están interesadas en unirse a este ecosistema.
Nuestros próximos pasos serán…
- Contactar con el movimiento de la Economía del Bien Común para que nos ayuden a definir más en detalle las funcionalidades de la plataforma en línea con su modelo.
- Desarrollar un prototipo funcional a modo de producto mínimo viable de la plataforma colaborativa para seguir testando e iterando.
- Una vez lanzada la plataforma web piloto, contactaremos con las personas y organizaciones que nos han apoyado hasta aquí, para que nos ayuden a dar a conocer el ecosistema y seguir co-creando el resto de funcionalidades, puesto que un ecosistema colaborativo solo se puede crear con la ayuda de las personas que lo forman.
Conclusiones
La tarea no será sencilla y queda mucho camino por recorrer, pero sin lugar a dudas, esta plataforma promete dar respuesta a muchas preguntas y fomentar la transición hacia el nuevo imaginario colectivo de quienes se reconocen como agentes del cambio hacia una normalidad más sostenible.
Un proyecto realizado por:
Riccardo Fresco — UX/UI Designer & Web Developer
Mercè Carreras-Solanas — Prof. Economia UB-EBC & Teamlabs All Stars
Beatriz Villalón — Ingeniera de Diseño Industrial y desarrollo de producto
María Ferrer — Ingeniera de Diseño Industrial & Consultora de Sostenibilidad y RSC
Gracias a UXER SCHOOL y TEAMLABS por lanzar la iniciativa y a Nina, David y Javier por el apoyo durante el proyecto.
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